Aquí os reproducimos la carta enviada por un padre de nuestro club a la pagina web «Castellón Base». El A.C.D. quiere agradecer sus palabras y recordar a la vez a aquellos otros entrenadores que no siendo padres utilizan su tiempo para entrenar-educar a los niños de nuestro club.

LA FIGURA DEL PADRE ENTRENADOR

Navegando entre los diferentes blogs que hablan sobre fútbol base uno encuentra muchos artículos en los que se habla de los padres que se dedican a ejercer de entrenadores contradiciendo lo que los entrenadores dicen a los niños, cosa que no está bien, pero no he visto todavía en ningún foro de ese tipo que se hable de una figura que es absolutamente necesaria, aunque no por ello menos criticada, para que miles de niños puedan disfrutar de su deporte favorito. Estos son los padres que dedican una parte de su tiempo a convertirse en entrenadores de los equipos de fútbol base de muchos clubes que no tienen recursos suficientes para permitirse entrenadores titulados, porque aunque a veces se olvide, a fútbol se juega en todas partes, no sólo en las escuelas de prestigio, y hay pueblos pequeños en los que si no fuera por la ayuda desinteresada de estos padres que hipotecan su tiempo libre para dedicarlo a que sus hijos y los hijos de otros disfruten y aprendan, habría miles de niños que no tendrían la oportunidad de practicar el deporte rey.

Muchos son los que predican los inconvenientes de esta fórmula pero yo, desde la experiencia vivida en el club en el que juega mi hijo, (conste que no soy yo el entrenador-padre), y no solo en el equipo en el que juega él, si no también en otros que utilizan el mismo método, veo muchas más ventajas que otra cosa. Quizá no tengan todos los conocimientos que sería necesario, pero, ¿alguien va a tener más compromiso, implicación y dedicación que un padre para el equipo de su hijo?¿de verdad sería mejor dejar a todos esos niños sin fútbol por no tener la suerte de vivir cerca de una ciudad o un núcleo con mayor cantidad de niños, y por tanto con mayores recursos económicos? Yo hoy rompo una lanza en favor de esas personas y les doy las gracias públicamente, además de animarles a que sigan con su labor por encima de cualquier opinión”especializada” que pueda llevar a pensar que lo que hacen no está bien para que de esta forma sigan favoreciendo que miles de niños practiquen y aprendan de forma reglada las virtudes de este gran deporte que es el fútbol.

Artículo de Sergio Farre Robador.

http://castellonbase.com/la-figura-del-padre-entrenador/